Rapport

 

Fundamentos: Es el principal elemento de toda comunicación y cambio en la PNL. Está determinado por el contacto, acoplamiento y sincronización entre dos personas, donde interviene de una manera especial, el modelo del mundo de la persona a la que le hacemos el Rapport, o sea su mapa que se manifiesta por su Sistema Representativo.

Deberemos por tanto primero observar al individuo y poco a poco sin que el sujeto lo aprecie, ir adaptando sus posturas y su respiración a la nuestra. Por tanto el Rapport necesita de una armonía, respeto, delicadeza, sutileza y comprensión para que posteriormente podamos establecer un sentimiento de concordia que le permita sentirse en un estado satisfactorio y así pueda comunicarse espontáneamente y pueda revelarnos datos que en otra situación posiblemente le resultara muy incómodo y comprometida.

La primera parte del Rapport consiste en acoplarse adecuadamente a través de la respiración, del habla, de los gestos y de las distintas posturas corporales con el fin de ayudar, calmar y relajar a la persona a la que le estamos haciendo el Rapport.

Posteriormente la deberemos dirigir, teniendo siempre presente que las únicas limitaciones que podemos encontrar, son las nuestras.

 

Objetivos: Por tanto podemos afirmar que la clave de todo buen Rapport es una buena calibración a través de una buena comunicación con la persona y cuyas bases las podemos resumir en la motivación o predisposición de hacer lo que se hace, que a su vez se pueden detectar por medio del SR. Las interferencias pueden ser prejuicios, creencias, estados de ánimo tanto del emisor como del receptor.

El contexto tiene mucha importancia, ya que un mal ambiente, decoración o ruidos podrían perjudicar el resultado. Los medios que utilizamos serán de suma importancia, ya que no es lo mismo utilizar palabras que imágenes, el contacto físico, que el teléfono. El feedback que nos indicará aspectos importantes, como son si la persona recibe nuestra información de una manera correcta.

Es importante resaltar que puede ser espontáneo, silencioso y observando el SR del receptor, ya que resulta de los más valioso. También debemos de tener en cuenta la escucha activa y la intención que deberemos tenerla claramente definida y saberla expresar sinceramente, constatando a dónde nos conduce, debido a que es importante analizar si existe en nuestro interior alguna otra intención oculta, que suele resultar muy frecuente y poco fácil de detectar.

La escucha activa deberá realizarse simplemente escuchando, deteniendo nuestro diálogo interno, que nos permita detectar si existe congruencia entre la comunicación verbal y la no verbal de la persona. Cuando el mensaje no nos llegue claro, deberemos pedir más información.

 

Trabajo realizado por Benigno Horna, para el Experto en PNL.

Universidad Camilo José Cela. 2008